con el "nuevo siglo"

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"Seis estrellas
en Madrid"

Eulalia Uliverri
López-Marin: autor
Bonifacio Pinedo
Moisés Iglesias
Lucrecia Arana
Severo Uliverri
Dos en Valencia

"Maestro Lope"

Julita S. Campos

Son la cosecha riojana de finales del ochocientos, que como las viñas, desaparecen al iniciarse el siglo XX.

Ocio
espectáculos
década
Espectáculos del pasado
Los ecos de las ‘estrellas‘ del ocio de finales del siglo XIX se dejaron sentir aún en estos años diez del Novecientos, en toda España, en La Rioja y en Logroño capital.

Pero van retirándose o muriendo algunos de estos símbolos, de modo similar a las Sociedades recreativas. Primero se ausenta Lucrecia Arana, después Eulalia Uliverri. El Maestro Lope, Pinedo y Julita Campos mueren con la década.

Asimismo las zarzuelas, los géneros frívolos, los cafés-teatro lentamente se desvanecen, como lo hicieron sus protagonistas. Y hasta el espacio del teatro dejó de ser el Principal para pasar a convertirse en "Teatro Bretón de los Herreros" en honor del autor riojano del mismo nombre.
Los redactores logroñeses de "El Siglo" ofertan claveles al niño, símbolo del NOVECIENTOS, que tan tierno, quiere iniciarlo aprendiendo, en consonancia con "formas regeneracionistas" del siglo XX.

El gran portagonista: el Nuevo Siglo
el gran "adelanto de la modernidad social" del Novecientos ‘El descanso dominical’
Francisco Largo Caballero - 1904
Casi en silencio, aunque con alguna polémica y no pocos detractores, llegó, en 1904, por Real Decreto (Gaceta de Madrid, 4 de marzo), el más destacado impulsor del ocio y de los espectáculos en los años del "siglo de las dos equis". Lo apoyaron el Cardenal Primado de Toledo, los representantes obreros del Instituto de Reformas Sociales, y contó con buen número de simpatizantes (Entre ellos, la empresa de La Rioja, 6-III-1900).
Un día a la semana, exentos del trabajo. Se ordenaba cerrar los talleres y las fábricas; las tiendas y los comercios; las oficinas y los despachos; y hasta el campo, y las "Plazas de Toros", algunos, los quisieron cerrar. Al fin se podrían dedicar, el domingo, a cualquier cosa que no fuera el trabajo. Veinticuatro horas cada siete días, o a la semana, en exclusiva, para el recreo, en la fórmula que se deseara. "El domingo, al reposo, a descansar, a permitir al cuerpo y al espíritu el tranquilo goce ganado en seis días de esfuerzo perseverante" editorializa " La Rioja".
Pocos en la ciudad sabían, si es que había alguno, quién era Marinetti, pero todos soñaban con el futuro y vivían los inventos como un bello y grandioso espectáculo.

Y es que en la primera década (1900-1909) se prodigan, en los "Avisos y Noticias" de La Rioja, nuevos inventos y formas de vida que empiezan a asomarse por la región. Se vieron automóviles -muy pocos- desde 1905 con las letras LO en sus matrículas. Se soñó con máquinas como el "telewriter", el "fonógrafo" - como el de Lorenzo Colis-, el "animatógrafo", el "grafofono" y el "telequirógrafo". Y hasta con un aparato para ordeñar a "los animales".

Llegan los primeros aeroplanos y las "luces" iluminan -con cierta pericia- los paseos y las calles. También las industrias, algunos "pudientes" locales y los centros oficiales instalan los primeros teléfonos. Y no faltó, lo que los hermanos franceses Lumiere, llamaron, de modo mimético a los inventos anteriores, "el cinematógrafo".

En el Novecientos
Nuevas formas de ocupar el ocio
Cine en Logroño por primera vez:
 18 noviembre 1896
Cinematógrafo
Se mostraron "fotografías en movimiento" en barracones de ferias y en "lugares inadecuados", con cierto éxito. La fama de peligrosos, y las tragedias que conllevaron, retrasaron la firmeza de las propuestas "cinematográficas" hasta los años diez, aunque se programaron demostraciones en Logroño, Haro, Calahorra,... antes de terminar el XIX. Y con el nuevo, comienzan a realizar "negocios redondos" en San Bernabé o San Mateo en el Paseo de Los Reyes, o se convirtieron, con "picotero", en auxiliares o "Fin de Fiesta" de otros espectáculos en el Bretón en temporadas de funciones de distinto signo.
Nuevas Sociedades recreativo-culturales
Las organizaciones de recreación decimonónicas, o morían, como "La Fraternidad", o se debilitaban, como "El Círculo" y "La Amistad", dando paso a otras del nuevo signo, como el "Círculo de la Juventud Republicana", el "Círculo Católico", el "Centro Artístico", los "grupos de culturización" de las "Uniones Obreras" o el "Sport Club". Y otras muchas Asociaciones animadas por estudiantes de bachillerato hijos de las clases más acomodadas de la población.

El ocio dominguero fortaleció estos espacios con clases y sesiones educativas, actos festivos, reuniones y debates, y en general, con miltancias socio-políticas muy definidas. Y también, con organización de espectáculos, en exceso focalizados.

EL CENTRO ARTÍSTICO "¡Prohibido el juego!"
Salvador Aragón Barrón. Primer
Presidente del Centro Artístico

Este es el Centro del "ocio culto" de los privilegiados de la ciudad con el poeta y escritor Salvador Barrón, el músico Fermín Maguregui, el periodista Leandro Sáenz de Cabezón -Montemar- y el abogado y autor teatral Florencio Bello, como grandes animadores.
En su Reglamento se prohiben los "juegos de todo tipo" sustituyéndolos por veladas musicales con "aporreo del piano por varios maestros conjuntamente y con ambas manos"; por conferencias de temas de actualidades; por lecturas en alta voz de clásicos del "mundo antiguo" o de poesíias de los propios socios, que no dejan de ser malabarismos lúdicos de 'La Bella Época'.
El "Sportman" Saturnino Aragón
SPORT CLUB
... "los sport como juego"...
Se asoman los "sport" de todo tipo -incluido el foot ball-, al crearse el Sport Club en 1905 bajo la Presidencia y ánimo de Saturnino Aragón y "compuesto de lo más culto y selecto de la juventud logroñesa", y algunos alcanzan ingresos sustanciosos, como "el sport vascongado" en el Frontón Logroñés dirigido por Castellanos, que acomoda el espacio para el profesionalismo, y en el que triunfan Peré, "el trío de invictos de Murillo", Lechuga (Pablo), los "Molineritos", Fidelín,... con enfrentamientos con campeones vascos prefederativos, tales como Baltazar, Fernández, Urzelay, Chiquito de Azcoitia y otros.
CENTROS DE
... "las juventudes"...
Pero sobre todo son los Centros de las Juventudes los que presentan las notas más distintivas. "La Juventud Republicana", desde enero de 1904, además de enfrentamientos contra los "clericales", organiza conferencias, sesiones teatrales y bailes de cohesión ideológica. En el "Círculo Católico" sucede algo similar, aunque con ideología invertida. "Los jóvenes estudiantes per se, y meteoros del arte escénico durante las vacaciones, hacen y deshacen sociedades y compañías dramáticas, arman y desarman sus teatros y hasta cargan con los muebles y utensilios" mientras ensayan, pleitean, conviven,... en "refugios" cedidos por sus progenitores teniendo en lontananza el teatro, como demuestran "El Lope de Vega" o saloncito del Sr. Infante en la calle de Vara de Rey; el "Teatro Teresa" y "La Tertulia", entre otros, en los que prende la semilla futura de los aficionados a las representaciones.

Entre la tradición y la modernidad
Los "Juegos Florales"
Se promueven durante esta década Juegos Florales, destacando los del Instituto en 1900, con Amós Salvador como mantenedor; los del 1907, que interesaron a los redactores de "El Nuevo Mundo" (imagen inferior) ; o los del año cierre de la década, con Eduardo Barriobero Herrán como conferenciante, organizados por el Centro Artístico

Carmen Barrón y su "corte de amor".
Juegos Florales de Logroño - 1907
De 'Principal' a
teatro "Bretón de los Herreros"...
El cambio de titulares (Caja de Ahorros Municipal) y de empresarios (Comisión Ciudadana, presidida por el industrial del mueble Ramos Toledo -entre 1902 y 1906- y Rodrigo García Jalón y Francisco Martínez Merino, "Parrita" -de 1906 a 1910-, no sólo renuevan el aspecto físico del Teatro de Logroño, sino que transforman las estrategias con un nombre distinto (Teatro Bretón de los Herreros) y con programas más variados y de mejor calidad.
Fachada del Teatro Bretón de los Herreros

En el Teatro Bretón de los Herreros, que se inaugura, una paradoja más de esta ciudad, con Echegaray, se representa no sólo teatro. También se escucha música, se celebran mítines, se imparten conferencias y charlas. Se organizan concursos, se aplauden las jotas y se oyen los lamentos del cante flamenco. Es el espacio de refencia obligada para los actos maxivos comunitarios.en la primera y posteriores décadas del novecientos. "Ahí está", como la ... No queremos hacen una frase fácil.

Nosotros hemos acumulado los actos y sesiones entre 1900 y 1909. Son muy numerosos y se ajustan a todos los grados de calidad. No los referimos para dar opciones a que los trabajen los especialistas. Desde luego hay amplio campo.
Mientras tanto el primer
"Teatro Moderno"
Y mientras se hacen las reformas en el Bretón, "El Teatro Moderno" (con Fray Cirilo, redactor de La Rioja, como gran mentor) programa "trabajo chico, obra de verso, zarzuela seria" y música selecta, reportando "buenas entradas" a "precios bien arreglados". La afición logroñesa al teatro industrial continuaba intacta.
El "Kiosko" de "Las Delicias"

Siempre quedaba el 'Kiosco'

Mientras unos pasan, y llegan otros, sean infraestructuras y personajes, hay en la ciudad algunos 'símbolos' que resisten y prolongan su presencia y eficacia socializadora alimentando los modelos pretéritos del descanso ortodoxo. Entre ellos, el "gran héroe" fue el Kiosko del paseo del Príncipe de Vergara, o del "El Espolón". Desde 1892 hasta 1953 es 'la base' para las 'citas' y para los 'quedes' de los jóvenes y no tan jóvenes de la población. La musica, acomodada a los gustos de cada época, es tal vez la excusa, pero es verdad que cuando faltaba, todos, 'chicos' y 'grandes', se sentían incómodos. Carecían de algo con lo que siempre contaban para bailar, para cantar, para discutir, para mirar o para silbar. La nostalgia con la que hablan los que lo disfrutaron y denostaron, también, sigue emocionando a los que no lo conocimos.

Se merece un homenaje, o tal vez una restitución en alguno de los muchos lugares recoletos que aún quedan en la ciudad. Nos ahorraríamos muchas facturas en tablados y tenderetes. Y tal vez, eliminaríamos algunos peligros y no pocos accidentes. ¡Concejales, aquí hay un buen tema!
Ocio entre 1889-1899Ocio 1900-1909Ocio 1910 - 1920Ocio 1920 - 1930Ocio 1930 - 1949Ocio 1940 - 1950Ocio 1950 - 1960Ocio 1960 - 1970